De voces femeninas

Hombres:

Lamentablemente ha llegado el lastimoso momento de hablar brevemente de las mujeres. Como tal vez se pudieron dar cuenta lo había estado evitando escribiendo de música, política y demás. Pero lo que realmente nos mueve a todos nosotros son las mujeres. Como escuché alguna vez de un famoso comediante negro: "To be happy, men only need to eat and to fuck. So fuck me and let me have the big piece of chicken." Bueno, no me lo sé de memoria pero era algo así.

Total que bien comidos empezamos a sentir la única otra necesidad que nuestro cuerpo conoce, la de una mujer. Y cegados por el deseo vamos dando tumbos de las maneras más ridículas que podríamos imaginarnos. Un hombre sin mujer, respeta los tropiezos de su compañero en miseria que busca a una mujer. A un hombre con mujer, un hombre buscando mujer y cometiendo dichas pifias le parece extraño pero respetable. Es decir, lo único que nos perdonamos entre hombres son las tonterías que hacemos para conseguir mujeres.

Si todos los hombre estuvieramos buscando mujer, nadie hablaría mal de las mujeres. Pero afortunadamente existen: los hombres sin mujer lastimados por las mujeres y los hombres con mujer. Tanto a los primeros como a los segundos no les parecerá extraño identificarse con las siguiente opinión. ¡¿Qué demonios les pasa a las mujeres?!

Hoy me he dado cuenta de que el problema de las mujeres no es nada más el que el famoso comediante negro identificó: "Women need more than food and sex, they need EVERYTHING. That's not the problem, we can spend our lives trying to get them everyting. But over that, they don't want to fuck and they want to eat the big piece of chicken." Un problema grave, totalmente de acuerdo, pero el hombre moderno ha aprendido a vivir con poco sexo y poco pollo. Negando diariamente su masculinidad cavernícola en busca de mantener una mujer a su lado.

El verdadero problema con las mujeres en estas épocas es que tratamos de entenderlas. Por eso los hombres que no las consiguen las odian y los que si las consiguen las detestan, ja ja ja. Bueno, las aman pero las detestan, en intervalos cortos y por periodos iguales de tiempo que se alternan constantemente, ustedes saben como funciona (no se hagan).

Y no está mal que tratemos de entender a las mujeres, lo hacemos así como parte de los ridículos tumbos que damos tratando de obtenerlas o de conservarlas. Lo que está mal es que las mujeres no quieren que las entendamos. Hoy tuve la visión de una mujer pensando: "No soy lo suficientemente rara, ¿que hago?". ¿Eso hacen verdad? Dedican largos periodos de su tiempo a pensar en cosas nuevas raras que hacer, que nos pongan a dar tumbos otra vez, por su terrible necesidad de sentirse deseadas y la erronea concepción de que entre más ridículos nos ven más enamoradas estamos de ellas.

Mujeres:

Tranquilas. Entiendan que lo único que neceistamos es "the big pice of chicken" creo que la misma frase aplica para los dos contextos. Ustedes no tienen que entender a los hombres, tienen el poder en sus acciones, ustedes lo saben. El problema es que creen que si no nos traen de ridículos tras de ustedes no las queremos.

Pues no es cierto. Siempre las vamos a querer, con todo y tumbos. Y ustedes nunca estarán tranquilas, simpre tratando de ser más raras, inventando cosas para hacernos perder de nuevo el rumbo. ¡Qué dificil esta necesidad de tener algo que no quiere ser tenido! Dedicar todo el tiempo a perseguir algo que todo el tiempo quiere ser perseguido. Y así, nosotros dando tumbos y ustedes haciendo grandiosos pases de torero (¡Olé!), creamos la danza más ridícula, antigua y universal, el amor.

Música maestro. Bendita suerte de los que nacimos con dos pies izquierdos.